09/11/2022
Desde el 7 al 10 de noviembre en la provincia de Mendoza, se están realizando los ejercicios binacionales en conjunto de protección civil “Solidaridad 2022”, entre las fuerzas armadas argentinas y chilenas. En el tercer día de los ejercicios, el ministro de Defensa, Jorge Taiana, junto al subsecretario de Defensa de Chile, Gabriel Gaspar Tapia, y los jefes de las Fuerzas Armadas de Chile y Argentina, supervisaron el desarrollo de los mismo.
Desde hace varios años se vienen realizando este tipo de
ejercicios con el objetivo de fortalecer la capacidad de respuesta del Sistema
Nacional de Protección Civil, con respecto a simulacros de catástrofes
naturales, con la finalidad de brindar asistencia humanitaria ante las
emergencias.
Elementos humanos de las Fuerzas Armadas de Argentina y
Chile, Fuerzas de Seguridad, organismos gubernamentales y no gubernamentales de
Mendoza, articularon distintas actividades y actualizaron protocolos en función
de las tareas de búsqueda y rescate, apoyo a la emergencia en casos de
catástrofe.
Ante una simulación de un sismo de 7.5 grados en la escala
de Richter y con fuertes consecuencias en la provincia de Mendoza, los
organismos especializados fueron coordinados por el Estado Mayor Conjunto de
las Fuerzas Armadas (EMCO).
Con la implementación de medios terrestres, aéreos y
acuáticos pertenecientes a las unidades militares de ambos países, se
ejercitaron tareas de simulacros de evacuación y atención de heridos, búsqueda
y rescate de cuerpos en agua, como así también en zonas de derrumbe,
descontaminación de material peligroso y potabilización de agua de emergencia.
Otro de los propósitos asignados con este tipo de
ejercicios, es concientizar a los ciudadanos en la organización de un Plan de
Acción Familiar (PAF) y en el armado de la mochila de emergencia.
En el Parque General San Martin, se desplego el Hospital
Militar Reubicable 603 del Ejército Argentino, este nosocomio de campaña, está
instalado con 13 módulos sobre camiones con instalaciones de: terapia
intensiva, laboratorio, radiología e internación, convertidor de oxígeno,
cocina, generador eléctrico y potabilizador de agua. También en el lugar se
emplazó el Centro de Evacuados de la Armada Argentina.
Bajo la simulación de un sismo a gran escala, y con la
premisa de situaciones de emergencias a los largo y ancho de la provincia como
la destrucción de las infraestructuras más importantes de la misma como por
ejemplo: la inhabilitación del aeropuerto, varios derrumbes de gran envergadura
en puentes principales, la ruptura de los canales aluvionales que cruzan las
principales arterias de la ciudad, una gran cantidad de víctimas atrapadas por
estructuras colapsadas y un sin número de ahogados, por las crecidas
aluvionales que produjo la ruptura del dique Potrerillos, se instaló el Centro
de Operaciones de Emergencia Provincial (COEP), lugar de coordinación de las
fuerzas armadas binacionales, agencias oficiales y no oficiales afectadas en
esta situación ficticia, como Policía de Mendoza, Bomberos Voluntarios, Aysam,
Edemsa, Ecogas, Defensa Civil, entre otras.
La importancia de estos ejercicios
Los ejercicios binacionales se vienen realizando cada tres
años. Tras el acuerdo sobre Cooperación en Materia de Catástrofes, que
Argentina y Chile firmaron en 1997 con la finalidad de realizar acciones en
respuestas a casos de catástrofes de origen natural o provocadas por los seres
humanos.
La importancia de estos ejercicios de Protección Civil,
radica en simular situaciones muy complejas en lo que se refiere a casos de
emergencias y evaluar las capacidades de respuesta lo más eficazmente posible,
recuperando la normalidad bajo acciones directas y saber que herramientas
cuenta cada organismo ante una situación de emergencia a gran escala.
Con este tipo de simulaciones se pretenden evaluar los
distintos planes, procedimientos y protocolos conocidos y validados previamente
en la teoría y ponerlos en práctica mediante los simulacros. De esta forma son
ajustados regularmente.
Algo para destacar en este tipo de simulaciones, es que los
tiempos que se fijan son hipotéticos y llevados a la práctica mediante
simulacros se pueden evaluar lo más cercano a la realidad, de esta forma
ajustar los planes de contingencias lo más óptimo posible.
En conclusión, tenemos que una simulación busca reforzar los
equipos interdisciplinarios frente a la preparación de la información, el
planeamiento, la revisión, la comunicación, la toma de decisiones y el detalle
de cada evento de la emergencia. El simulacro en cambio, comprueba todo eso, y
además de evaluar y pone a prueba las habilidades, las técnicas y no técnicas.
Por tal motivo para nuestra provincia es de vital
importancia contar con este tipo de ejercicios, sobre todo por nuestra
historia.